Friday, February 29, 2008

Mi camino


Yo, por unos motivos u otros, elegí esta vida. Elegí esta vida que llevo, pero sobre todo me estoy refiriendo a los amigos que tengo.

Al volver del cine, me he encontrado con Pino, Fran, Adri, Iván, Hinojosa, Vladi, Ana Pardo, Dani Haspano, y creo que nadie más relevante... Encontrarme con estas personas, a las cuales tengo mucho cariño pero no salimos, quedamos, ni realizamos actividades de amigos, propiamente dicho, siempre me hace pensar en lo mismo.
¿Y si yo hubiese elegido esa clase de vida?
No hay más que ver que desde que entré en primero de bachillerato, el grupo de amigos que se formó ha sido una constante ruptura hasta que mi círculo es algo realmente pequeño (cosa de la que, conste bien claro, no me quejo). Esta gente, sin embargo, se han mantenido juntos con el paso de los años y los años. Son de una vida social muy muy activa, constantemente haciendo planes, viajando, saliendo por la noche... moviéndose.

Yo elegí una vida un poco más... humilde, en ese sentido. Más introvertida. Y aunque la disfruto, pienso, ¿si yo hubiese continuado juntándome con ellos, saliendo con esa clase de grupo... cómo sería yo ahora? ¿Cómo de diferente sería mi vida?
¿A qué personas conocería? ¿Cómo serían mis salidas de fin de semana? ¿Mis vacaciones? ¿Mis contactos y mi manera de ver la vida?

Sería todo tan distinto.

Pero lo esencial seguiría siendo igual. Y eso lo sé, porque ya se me presentó la oportunidad de elegir esta vida, muchos años atrás.

Y en su momento ya decidí que esa vida no era para mí. Y eso fue tan cierto entonces como lo volvería a ser.

Esta es la vida que elegí.
Y qué distinta podría haber sido.

Wednesday, February 27, 2008

Sale caro



Dicen que soñar es gratis...


Ya comenté anteriormente cómo había comenzado a temer el desear cosas. Va a peor. Pierdo la ilusión. Pierdo la esperanza. Soy capaz de disfrutar del instante. Si una mañana me levanto de buen humor, y el aire es especialmente alegre, eso no me lo quitará nadie.
Pero ya no me permito soñar con un futuro mejor. Porque tengo miedo de condenarlo. La gran frase "no te hagas ilusiones..." nunca antes había tenido tanta fuerza en mí.
¿Por qué? Es absurdo, ridículo. No tengo una mente capaz de establecer una realidad contraria según lo que yo haya soñado o deseado. Pero de verdad, hay veces que de verad lo parece.

Lo sé. Sé a lo que puede sonar esto: "¡Por qué la vida es tan injusta! ¡Por qué nunca ocurre lo que yo quiero!". No, no es eso lo que estoy diciendo. Me ocurren cosas buenas. Me ocurren más cosas buenas de las que merezco. Pero todo lo demás... se queda en mi cabeza. No hay ilusión. Es un lujo que estoy empezando a dejar de permitirme.
Es unocura. Seguramente porque me estoy volviendo loco. Pero todo se desmorona. Lo llevo viendo venir desde hace tiempo, en cosas pequeñas. Como por ejemplo, que basta con que me imagine algo de alguien que acabo de conocer para que esa persona resulte ser todo lo contrario.
Etc... etc...

Quizás eso explique mi mala suerte con las mujeres: todas resultan tener novio, otro tio que les gusta, o ser lesbianas, etc...
O el cómo no he podido examinarme de verde convocatoria tras convocatoria.
O que el corto se haya ido a la mierda.
O tantas otras cosas.
Qué se le va a hacer.

Por favor, que alguien me detenga. Que alguien me impida convertirme en una persona que abandona todas sus ilusiones y todas sus esperanzas solo por miedo a destruirlas, a condenarlas al fracaso, y a vivir de gritarse a si mismo "¡No!" cuando algo le empieza a ilusionar, haciendo que desée que vaya a mejor. Porque ya no me permito hacer eso. No me dejo. Y me da miedo convertirme en un amargado.

Y dicen que soñar es gratis.

Pero a mí últimamente me está saliendo caro.

Monday, February 11, 2008

Y ya van dos, ejem...


Y ya van dos, damas y caballeros...

LA MANO DEL ALQUIMISTA

HA CUMPLIDO DOS AÑOS


Sí, bueno... el problema es que los cumplió hace dos dias (el 9). En fin, no cambio. El año pasado, cuando cumplió un año llegué un dia tarde. Este año dos dias. Poco a poco, llegaré un año tarde. ¡Mola! Claro, que para eso tendrían que pasar 365 años... La verdad, espero que no dure tanto, por Dios.

Bueno, Mano del Alquimista. No me guardes rencor. Todos los que me conocen saben que siempre olvido nombres y fechas. Y cuanto más importantes, más posibilidades de que se me olviden (me compadezco de la primera novia con la que lleguemos al año...). Pero oye, eso no significa que no me tome la molestia de traer fuegos artificiales. El problema es que la legislación me impide hacerlos saltar en un espacio cibernético debido a la falta de existencia física tangible. Pero esos fuegos siguen vivos en mi corazón... oish, menuda mierda.

Un año de estos te daré un trozo de tarta de chocolate. Pero uno de verdad, ¿eh? (chiste friki, no creo que lo cojáis).

En fin, siempre espero a hacerlo todo al último momento. Le he dado al botón de PUBLICAR ENTRADA en el mismo instante exacto en que el reloj del ordenador pasaba de 11:59 a 0:00. De no ser por eso, habría contado como publicado el 12, en lugar del 11. Soy un vividor. Lo mismo me pasó con el post de año nuevo.
Y lo mismo me pasa con el carnet del coche. ¿Cuándo me expira la matrícula? El 10 de marzo. ¿Alguien adivina cuándo tengo el examen...?
Si es que vivo a tope. Todo al límite, al último momento, el instante final antes del orgasmo culmen...

Vale, mentira. Que soy un vago desorganizado que lo deja todo para el final, para qué engañarse.

Ah, y la razón por la que he podido seguir escribiendo es porque he hecho trampas. Una vez publicado el post, le he dado a "modificar" para seguir escribiendo todo esto y añadir la correspondiente foto. Que alguien me denuncie...

Ah, por supuesto: Gracias a todas aquellas personas que me leen. No cree este post para ser un periódico de internet leido por todos, y gracias a Dios no lo está siendo. Pero siempre es agradable saber que gusta lo suficiente como para alguien se moleste en dedicarle un minuto de su vida a cada entrada. Y gracias a los que comentan también, por supuesto. Quieras que no, un comentario siempre anima.
"Gracias a los fans de la Mano del Alquimista. Sois los mejores, de verdad...". Eso es lo que NO digo ni quiero que me dejéis decir. Seguiré escribiendo.
Sentíos libres de leer.

Saturday, February 09, 2008

N-H


Hoy después de la comida se ha desencadenado un debate filosófico entre los miembros de la familia (estábamos los ocho, cosa que se da muy pocas veces desde hace tiempo) y yo me quedaba escuchando en silencio, atento a todo lo que decían.

Y como suele ocurrirme en los debates, escuchaba una opinión que me parecía interesante, y casi convencible, pero es que luego sonaba otra que era capaz de hacerme cambiar de opinión.

Me ocurre mucho. Cuesta creer que alguien que estudia filosofía tenga tan pocos criterios. Siento como si todo el mundo supiera qué defender. Pero yo no tengo nada claro nunca. Nunca nada es una seguridad que merezca ser defendida.
Joder, bueno, sí que las hay. Pero no dentro de temas de debate. En esos temas, cualquier cosa que pueda decir puede ser perfectamente rebatida, y mi opinión al respecto desmoronada.
¿Qué clase de fiabilidad tengo? Una especie de miedo a equivocarme. O quizás un absoluto miedo a equivocarme. Un "no digas nada. Dedícate a escuchar lo que los demás tienen que decir. Cualquier cosa que puedas decir será discutida. No enseñes: aprende".

Menudo filósofo triste estoy hecho, ¿eh? Que pocas cosas hay en mi vida que pueda decir en voz alta sin miedo a que sea discutido.

Thursday, February 07, 2008

¡Que llegue ya!

Quiero que llegue ya el verano. ¿Algún problema?

Lo echo de menos, sí. A sus noches, sus tardes y sus mañanas (las mañanas que llegaba a pasar despierto).

Aunque tampoco tengo prisa porque acabe este curso.

En fin, como todo en esta vida, tiempo al tiempo.

Sunday, February 03, 2008

Ya hasta me da miedo


Me he dado cuenta de que me da miedo ser feliz. Hasta ese punto he llegado. Quiero ser feliz, pero me da miedo que algo me haga ilusión, porque, sé que suena melodramático, últimamente, si algo me hace ilusión, o no se cumple o se cumlpe lo contrario. A veces parece que solo cuando dejo de soñar es cuando comienzan a ocurrirme cosas que podría haber deseado, pero no lo hice por miedo. Que absurdo todo esto, ¿no? Pero es que me ocurre siempre. Siempre que alguien me ofrece algo que siempre he querido, ya hasta me da miedo. Me acobardo. Pienso "no puede ser, esto no es real. Se supone que estas cosas solo me pasan en mi tranquila y segura imaginación. No ocurren en la vida real, donde pueden desaparecer en cualquier momento". Se me declaró una chica y mi reacción fue "no puede ser. No sabes lo que estás diciendo". Un año después, se me declaró otra. Mi reacción fue exactamente la misma: "no puede ser. No sabes lo que estás diciendo".
Y además, rozando el abusrdo, años antes, por messenger se me declaró también una chica que apenas conocía. Y aunque la situación tiene quizás menos validez, mi reacción fue calcada: "no puede ser. No sabes lo que estás diciendo".

Es como si no pudiese aceptar cuando me pasa algo bueno. No puedo aceptar que algo salga bien... con otras personas.

Relaciones de amistad, sentimentales, sociales a secas... me da miedo avanzar en ellas, pero sobre todo para bien. Si avanzan para mal, sé deshacerme de ellas llegado el momento. Pero si avanzan para bien, para algo genial, es... ¡Dios, qué se supone que tengo que hacer ahora! ¡Esto nunca lo había planeado para la vida real!

Y como ya he dicho, ahora es más grave. Antes tenía miedo de que fuese real, pero me permitía dar rienda suelta a la imaginación y a la fantasía.
Pero ahora me da miedo soñar con cosas mejores, por miedo a que el simple hecho de desearlo provoque que jamás ocurra... y total, si ocurriese, me pasaría lo mismo que siempre, que diría "no, no puede ser". Y lo mandaría todo a la mierda, como suelo hacer.
Y todo ese miedo solo provoca una cosa: miedo a perder las oportunidades de hacer lo que realmente quiero hacer.
¿Sabré abrirle la puerta a aquello con lo que siempre he soñado cuando llegue el momento? ¿Tendré el valor de hacerlo?
Bueno, hace tiempo hubiera sido lo bastante optimista como para decir que sí sin dudarlo.
Pero claro, he crecido para bien y para mal.
Capullo de mí.